Ya hace ocho años que Facebook comparte de manera deliberada la información de sus usuarios con empresas chinas, como es el caso de Huawei. Esta compañía ha sido catalogada por los oficiales de inteligencia de los Estados Unidos como una amenaza a la seguridad nacional por sus fuertes vínculos con el gobierno de China.
Las otras tres empresas que siguen a Huawei, son: Lenovo, Oppo y TCL, tal como la misma red social admitió ante un medio de comunicación estadounidense, luego de conocerse que la empresa ya lo había hecho con otras como Amazon, Apple, BlackBerry y Samsung.
Según se supo por la investigación, estos acuerdos son del año 2010 y que tras salir a la luz la denuncia, la red social ya no tendrá contacto con la empresa de telecomunicaciones.
Uno de los que más atención le pone a este tema, es el senador Mark Warner, demócrata de mayor rango en el Comité de Inteligencia del Senado, porque señaló que desde 2012 el gobierno de los Estados Unidos está preocupado por “las relaciones cercanas entre el Partido Comunista Chino y fabricantes de equipos como Huawei”.
El político concedió una entrevista con un medio estadounidense, donde también dijo que “Espero con ansiedad enterarme más de cómo Facebook se aseguró que esa información sobre sus usuarios no se envió a servidores chinos”.
Por su parte, Facebook se defendió diciendo que los datos de los usuarios solo se quedaron en el teléfono móvil y que nunca llegaron a pasar a los servidores de Huawei, sin embargo, prefirieron no dar mayores detalles sobre esto.
Cabe resaltar que los cuatro acuerdos aún vigentes con las empresas chinas, sumado a los que tiene con las empresas estadounidenses, le dieron a Facebook un gran apoyo en el mercado móvil para de esa forma fortalecer el funcionamiento de su aplicación en los teléfonos, a cambio de ofrecer productos vía la red social.
Según Facebook, este trato es similar al que existió con BlackBerry, porque permitió recoger información detallada tanto en los dispositivos de los usuarios como en los de sus amigos. Los datos a los que tenían acceso, fueron: dónde trabajaban, dónde estudiaban o si se habían graduado, cuál era su estatus de relaciones, qué cosas les gustaban, etc.
