Un equipo de científicos españoles ha desarrollado una nueva herramienta altamente sensible y no invasiva para diagnosticar cánceres y, a su vez, hacerlo, en un futuro próximo, en menos de tres horas. Su hallazgo se detalla en un artículo de la revista Nature Biotechnology.
El método ha sido desarrollado por el grupo de investigación de Eva Novoa en el Centro de Regulación Genómica de Barcelona (CRG). Actualmente, con el financiamiento de la Asociación Española Contra el Cáncer, lo están utilizando como base para desarrollar un nuevo kit que podrá determinar si una muestra es cancerosa o no.
Según ha explicado Novoa, cuando las moléculas de ácido ribonucleico de transferencia (ARNt) se modifican incorrectamente, producen proteínas defectuosas o incompletas, lo que se asocia a diversas enfermedades humanas, incluidas las neurodegenerativas, las metabólicas y el propio cáncer.
"Los ARNt son moléculas que contienen mucha información con enorme potencial para el diagnóstico y el pronóstico de enfermedades. Hasta ahora, no se han explotado (en la investigación), debido a la falta de métodos que puedan capturar esta información de forma cuantitativa y rentable", según la científica, que pone como ejemplo que algunos tipos de cáncer son difíciles de diagnosticar porque sus síntomas no son específicos y pueden confundirse con otras afecciones.
"Ser capaz de aislar moléculas de ARNt de muestras de sangre y cuantificar sus modificaciones puede ayudar a diagnosticar cánceres sin utilizar pruebas de imagen o biopsias invasivas. Además, el tipo de modificaciones del ARNt puede cambiar según el estado de la enfermedad, proporcionando valiosa información", añadió Novoa.
Los métodos actuales para medir esta información genética generalmente involucran técnicas como la secuenciación de última generación o la espectrometría de masas, con limitaciones para realizar el diagnóstico porque no pueden detectar las modificaciones o no son capaces de identificar en qué punto de la molécula de ARNt están.
Este nuevo método, denominado Nano-tRNAseq, puede medir tanto la abundancia como las modificaciones de las moléculas de ARNt en un solo paso y se basa en la secuenciación de nanoporos, una tecnología que puede analizar dichas estrucutras directamente, pasándolas a través de un pequeño poro y, de esta manera, detectar los cambios en la corriente eléctrica que se genera cuando cada nucleótido pasa por dicho orificio.
"Antes dependíamos de dos métodos separados que son menos informativos, tardarían semanas y costarían miles de euros para obtener resultados. Nano-tRNAseq es mucho más económico y podemos tener resultados en un par de días. En un futuro cercano, será en pocas horas", ha asegurado la investigadora del CRG Morghan Lucas.
Fuente: La República